El chrisma

Por

Guillermo Álvarez (3ºESO, A)

Esta fotografía no necesita palabras. Cualquiera ve que denuncia algo que se ve todos los días en todas las ciudades. Aunque la Navidad hace que nos parezca más triste o que nos demos más cuenta de la contradicción.

De pequeño pensaba que si la Navidad durara todo el año, a lo mejor no habría tanta gente durmiendo en la calle porque en estos días parece que todo el mundo tiene mejor corazón y todos queremos ayudar a quienes lo necesitan. Pero la verdad es que las ciudades no compiten por tener menos pobres durmiendo en la calle sino por otras cosas, como que su iluminación sea la más original o la mejor.

Así que si antes de la Navidad eras de los que duermen en la calle, al final de la Navidad no habrá cambiado nada. A lo mejor, como mucho, la gente te habrá dado alguna moneda más, habrás podido comer caliente algún día, dormir bajo techo alguna noche o habrás encontrado en la basura un juguete de los que les sobran a quienes lo tienen todo y lo habrás guardado para tener algo que regalar a alguien a quien quieres. Porque para ti, aunque no hayas podido pensar que has sido feliz, también habrá pasado Navidad.